Celebran a lo grande al patrono de la capital

Con un alto nivel de tradicionalismo se celebró este 25 de abril a San Marcos, santo patrono de la capital y de la arquidiócesis de Tuxtla.

Este año el novenario de la celebración inició el pasado 17 de abril, de acuerdo con lo que informó el presidente del Patronato de la Feria de San Marcos, Jorge Iván Pérez.

Desde el pasado 23 de este mes la celebración comenzó en el palacio municipal, con el festival de Joyonaqué, con el encuentro de ramilleteros.

Por la mañana del día 25, una celebración especial se vivió en el palacio municipal en donde se realizó la ensarta de flores, en donde las personas que participaron pudieron disfrutar de la música de marimba y un desayuno tradicional con tamales y café.

Momentos más tarde, el alcalde Carlos Morales y su esposa Norma Alcocer Rodríguez encabezaron el grupo que se dirigió a la catedral, en compañía de melodías interpretadas por músicos tradicionales, quienes portaron tambores y pito.

La ensarta de flores fue llevada como ofrenda a la catedral, con un aroma único y con un característico color amarillo.

En punto del mediodía se realizó la celebración eucarística, con la que la catedral se mostró abarrotada y reluciente.

Aquí la fe, las tradiciones y los colores viven una mezcla, que no se desprende de la historia, pues esta celebración es en veneración a San Marcos, la cual tiene sus orígenes en la época colonial, cuando los frailes dominicos erigieron en 1560 el primer templo en su honor.

San Marcos es el símbolo de la ciudad, por lo que misas, procesiones y eventos culturales se llevan a cabo en su honor.

La fecha de la bajada del santo es alrededor del 19 de abril, cuando los devotos retiran de su altar a San Marcos, para dar inicio a las festividades.

En esta ocasión, a lo largo de los últimos días se llevaron a cabo peregrinaciones, al tiempo que la imagen recorrió las calles principales de la ciudad en una multitudinaria procesión acompañada de música, danzas y fuegos artificiales.

En tanto que en el atrio de la catedral, algunos comercios se establecen de manera temporal para ofrecer productos como ámbar, trajes típicos y alimentos tradicionales como pozol, empanadas y taquitos fritos.

Sin lugar a dudas, la fiesta de San Marcos es más que una simple celebración religiosa: es un homenaje a la fe, la cultura y la historia de Tuxtla Gutiérrez.