Expertos en la materia, informaron que 65% del agua potable en Tuxtla Gutiérrez se pierde en las calles, debido a la longevidad de las tuberías que componen el sistema de aguas subterráneas en la capital chiapaneca, aunado a las tomas clandestinas hechas por la misma ciudadanía.
José Alfredo Araujo Esquinca, presidente del Consejo de Cuenca Grijalva-Usumancita, explicó que hasta el momento se tienen registradas 20 mil tomas clandestinas, lo que también merma la óptima captación de agua potable por parte de los usuarios que sí están debidamente registrados.
“Desgraciadamente la red de distribución de la ciudad, tiene una vida ya de más de 50 años, entonces el porcentaje de fugas es muy fuerte, por lo que de los dos mil litros de agua por segundo que salían de ciudad del agua, se pierden cerca del 65% por ciento, es decir, a las calles se tiran más de mil litros de agua”, dijo Araujo Esquinca.
En cuanto al clandestinaje, los establecimientos que más reinciden en esta operación deshonesta son los lavados de autos, quienes supuestamente hacen el contrato normal ante el Smapa, pero el agua que utilizan la “ordeñan” de la red, comentó el exdirector del Smapa.
Por otra parte, especialistas de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) en Chiapas, manifestaron que es necesario renovar de forma casi inmediata la red de tuberías y generar al mismo tiempo una campaña permanente contra el clandestinaje.
“De esa forma se podrá llegar a los estándares de Monterrey o Tecate, Baja California Norte, lugares que tienen un grado de eficiencia del 85%, desafortunadamente nunca podrá ser de 100%, ya que por razones naturales siempre se va a presentar alguna fuga”, concluyó Marco Antonio Parra Cota, director general de la Conagua Frontera Sur en Chiapas.