En el Foro de Intercambio Académico México-Alemania, la diputada Arlette Ivette Muñoz Cervantes destacó que en medio de una coyuntura compleja y convulsionada por el discurso que menosprecia la multiculturalidad, Alemania se erige como un aliado fundamental para el desarrollo de México.
La presidenta del Grupo de Amistad México-Alemania afirmó que en los últimos años el país europeo se ha consolidado como un socio estratégico y un referente en distintos planos; sus modelos de éxito en materia económica, institucional y educativa, le han permitido construir un liderazgo excepcional al interior de la Unión Europea y un papel determinante en el contexto internacional.
El embajador de Alemania en México, Viktor Elbling, sostuvo que su país es el número uno en el mundo en recibir a estudiantes extranjeros y en sus escuelas existen al menos tres mil alumnos, académicos e investigadores mexicanos.
Indicó que México, al ser un país industrial que se ha desarrollado en los últimos 20 años y con el potencial de empresas que tiene, no solo extranjeras sino mexicanas, el tema de la educación dual es importante, interesante y vital.
La nación mexicana “es un país donde se piensa que todo el mundo tiene que ir a la universidad para formarse, pero en Alemania dos tercios de la población no va a la universidad. Es decir, más de 60 por ciento pasa directamente a la industria, la cual los forma a un nivel comparable al universitario; únicamente son dos o tres años de estudio y prácticas, integrados a la empresa”, relató.
El diputado Federico Döring Casar, vicecoordinador de la bancada del Partido Acción Nacional (PAN), resaltó que México atraviesa una difícil agenda político-socioeconómica con Estados Unidos, en donde “la gran discusión de la clase política es qué hacer con Donald Trump, y está desperdiciando la relación con Alemania”.