El líder de los diputados del PRI, César Camacho Quiroz, calificó de correcto que la investigación del caso Odebrecht, por parte de las autoridades mexicanas, sea exhaustiva y profunda, para que se haga justicia, “no por consigna y tampoco con una visión corta o miope, justicia llanamente”.
Entrevistado en el Palacio Legislativo de San Lázaro, advirtió que el caso se debe investigar a profundidad y si hay responsables que se les castigue con la severidad que la ley establezca.
Cuestionado en torno a si el caso podría ser analizado por la recién creada Comisión Anticorrupción, Camacho Quiroz estimó que eso lo decidirá el Partido Revolucionario Institucional (PRI) y la propia comisión.
Sin embargo, estimó que no hay asunto público en el que puedan estar involucrados priistas, que esté ajeno a la competencia de la citada comisión, e incluso que sus resultados puedan ser conocidos por toda la ciudadanía.
Cuestionado sobre las voces que involucran al extitular de Pemex, Emilio Lozoya, con la empresas brasileña, el político mexiquense aclaró que las conductas penales “son conductas individuales”, por ello afirmó que le parece correcto una profusa, profunda y exhaustiva investigación de los hechos.
“Nos importa a los priistas que la investigación sea profunda, que se haga justicia”, reiteró el legislador federal del PRI.
Aplicar ley
Por su parte, el titular de la Procuraduría General de la República (PGR), Ricardo Cervantes Andrade, garantizó que la dependencia a su cargo actuará “con todo el peso de la ley, sin excepción”, en contra de los presuntos responsables del caso de Odebrecht.
Al inaugurar la Cumbre de Procuradores y Fiscales de América Latina, realizada en Puebla, en la que participan representantes de 12 países, el funcionario federal agradeció a la Fiscalía de Brasil el apoyo que brinda para proceder y sancionar a los responsables de ese caso.
“Tengan la certeza de que esta Procuraduría, con toda la experiencia que otros países nos han aportado en este tema, actuará con todo el peso de la ley, sin excepción, en contra de todos aquellos responsables”, expresó.
Asimismo, habló de la necesidad de afianzar los esquemas de cooperación en materia de corrupción, a través del intercambio de información oportuna, y estimó que Latinoamérica requiere refrendar los compromisos para combatir, sin excepción, este problema que atenta contra el Estado de derecho de los países.
Sostuvo que la corrupción ha dejado de ser un problema nacional y se ha vuelto un conflicto trasnacional.