Faltando tres jornadas para que concluya la fase regular del Apertura 2024 de la Liga MX, cuatro equipos se han quedado sin posibilidades para buscar un boleto para el “play-in”, por lo que ya se encuentran pensando en lo que vendrá el siguiente torneo. Al cierre de la fecha 14, Pachuca, Santos, Bravos de Juárez, todos con 10 unidades y los Gallos Blancos del Querétaro con nueve, ya no tienen posibilidad de poder aspirar a conseguir 10 puntos más, aunque ganen el resto de partidos para mover del décimo lugar, que en estos momentos son los rojinegros del Atlas. Dos de los casos que llaman la atención son los de Pachuca y Santos; el primero, por la regularidad que había mostrado el conjunto con Guillermo Almada, pese a que sus propios directivos le han desarmado en más de una ocasión el plantel que levantó el título en el 2022. Había logrado solventar las bajas, ya sea con canteranos o con refuerzos que han tenido un impacto importante, como en el caso del venezolano Salomón Rondón o el marroquí Oussama Idrissi
Cuatro equipos se quedan sin posibilidades
Faltando tres jornadas para que concluya la fase regular del Apertura 2024 de la Liga MX, cuatro equipos se han quedado sin posibilidades para buscar un boleto para el “play-in”, por lo que ya se encuentran pensando en lo que vendrá el siguiente torneo. Al cierre de la fecha 14, Pachuca, Santos, Bravos de Juárez, todos con 10 unidades y los Gallos Blancos del Querétaro con nueve, ya no tienen posibilidad de poder aspirar a conseguir 10 puntos más, aunque ganen el resto de partidos para mover del décimo lugar, que en estos momentos son los rojinegros del Atlas. Dos de los casos que llaman la atención son los de Pachuca y Santos; el primero, por la regularidad que había mostrado el conjunto con Guillermo Almada, pese a que sus propios directivos le han desarmado en más de una ocasión el plantel que levantó el título en el 2022. Había logrado solventar las bajas, ya sea con canteranos o con refuerzos que han tenido un impacto importante, como en el caso del venezolano Salomón Rondón o el marroquí Oussama Idrissi