El Deportivo Roma lució abarrotado de aficionados de todas las edades que acudieron para ver al “Príncipe de Plata y Oro” competir en contra de estrellas del Consejo Mundial de Lucha Libre (CMLL). Místico fue recibido con ovaciones, y esa gratitud fue correspondida por la leyenda viviente. En la función estelar, él y Dulce Gardenia vencieron a Okumura y Bucanero. Desde su presentación el ídolo de multitudes fue apoyado por prácticamente todo aquel que se encontraba en el recinto. Su salida fue una de las más aclamadas y, ante esto, el gladiador ejecutó sus mejores movimientos desde los primeros minutos. Tal y como era de esperarse, en su batalla hubo de todo: llaves, contrallaves, lances y patadas voladoras. A pesar de que Okamura y Bucanero también hicieron de las suyas, fue cuestión de tiempo para que el cansancio les pasara factura y no pudieran continuar al nivel de sus oponentes. En un momento, Místico se lució al aplicar su conocida llave “mística”, mientras que Gardenia sometía al japonés. Los contend
Místico brilla en su regreso al Roma
El Deportivo Roma lució abarrotado de aficionados de todas las edades que acudieron para ver al “Príncipe de Plata y Oro” competir en contra de estrellas del Consejo Mundial de Lucha Libre (CMLL). Místico fue recibido con ovaciones, y esa gratitud fue correspondida por la leyenda viviente. En la función estelar, él y Dulce Gardenia vencieron a Okumura y Bucanero. Desde su presentación el ídolo de multitudes fue apoyado por prácticamente todo aquel que se encontraba en el recinto. Su salida fue una de las más aclamadas y, ante esto, el gladiador ejecutó sus mejores movimientos desde los primeros minutos. Tal y como era de esperarse, en su batalla hubo de todo: llaves, contrallaves, lances y patadas voladoras. A pesar de que Okamura y Bucanero también hicieron de las suyas, fue cuestión de tiempo para que el cansancio les pasara factura y no pudieran continuar al nivel de sus oponentes. En un momento, Místico se lució al aplicar su conocida llave “mística”, mientras que Gardenia sometía al japonés. Los contend