La famosa que se enfrentó a un espíritu

Era 1920 y la actriz estadounidense Nance O’Neil, figura de teatro y del cine mudo de la época, decidió mudarse a una casona colonial que además de sus encantos arquitectónicos y su ubicación campirana tenía un detalle especial: en ella habitaban espíritus. El inicio artístico de O’Neil estuvo marcado por los señalamientos de su propio padre, quien no vio con buenos ojos que se dedicara al teatro, así que devoto creyente de Dios, pidió a su congregación que rezara por su hija, como si se tratara de una bruja o una mujer maldita. La artista, que triunfó tanto en el teatro como en el cine mundo y sonoro, compartió en abril de 1920, en el semanario cultural popular una sorprendente y terrorífica historia sobre lo que vivió en una casa en la que planeaba permanecer, pero no pudo estar más de diez días por culpa de los sucesos paranormales que ocurrieron desde el momento en que llegó. El que Nance fuera una medium, es decir, aquella persona que se puede comunicar los espíritus de personas fallecidas, agravó la sit