María Novaro: “queda una espina clavada”

María Novaro, directora saliente del Instituto Mexicano de Cinematografía, reconoce quedarse con la espinita clavada de que las películas nacionales pudieron llegar mejor al público, pero también considera que deja la mesa puesta para que, quien ocupe el cargo en el siguiente sexenio, pueda pedir más recursos federales para ocuparlos en la producción. Sabe que no se logró que hubiese una nueva Ley Federal de Cinematografía, consensuada por la comunidad fílmica durante meses de trabajo, pero está feliz de haber impulsado el ECAMC, un estímulo para comunidades indígenas y afrodescendientes, al que llama la cereza del pastel, por dar salida a proyectos de pueblos originarios. Novaro habla de los puntos neurálgicos que marcaron a su administración. Integrantes de la comunidad, básicamente, se han mostrado preocupados por la falta de aumento de recursos acorde a la inflación, el problema de la exhibición en cines de filmes nacionales y las cuestiones legales. Apoyos Novaro menciona más de mil 70 producciones hecha