La cantante Fey agradece los valores de respeto e igualdad que siente por la comunidad LGBT+, gracias a su familia, por lo que ha apoyado desde sus inicios musicales en los años 90 al movimiento por la diversidad sexual. “Vengo de una familia donde me enseñaron a respetar a todos, independientemente de su género, raza o cualquier otra diferencia. Mi mamá siempre decía que todos somos iguales, somos almas y lo demás es solo un cuerpo que nos representa”, expresa la artista de 50 años, quien espera que todas las personas se sientan libres de bailar y disfrutar en sus presentaciones. “Yo creo que es muy bonito poder hacer música que conecte desde el alma, desde el corazón, con la gente. Por eso, para mí, la música no tiene género, edad ni nada; es una forma de disfrutar”, añade. La cantante, cuyo nombre real es María Fernanda Blázquez Gil, se prepara para celebrar el Mes del Orgullo, primero con la canción “Bailando por ti”, que grabó en colaboración con Esteman. “Aunque salió por obra divina, no podría haber un
Mi familia me enseñó a respetar: Fey
La cantante Fey agradece los valores de respeto e igualdad que siente por la comunidad LGBT+, gracias a su familia, por lo que ha apoyado desde sus inicios musicales en los años 90 al movimiento por la diversidad sexual. “Vengo de una familia donde me enseñaron a respetar a todos, independientemente de su género, raza o cualquier otra diferencia. Mi mamá siempre decía que todos somos iguales, somos almas y lo demás es solo un cuerpo que nos representa”, expresa la artista de 50 años, quien espera que todas las personas se sientan libres de bailar y disfrutar en sus presentaciones. “Yo creo que es muy bonito poder hacer música que conecte desde el alma, desde el corazón, con la gente. Por eso, para mí, la música no tiene género, edad ni nada; es una forma de disfrutar”, añade. La cantante, cuyo nombre real es María Fernanda Blázquez Gil, se prepara para celebrar el Mes del Orgullo, primero con la canción “Bailando por ti”, que grabó en colaboración con Esteman. “Aunque salió por obra divina, no podría haber un