¿Cómo soportar la pérdida de alguien cercano? La cultura zapoteca decía que había que ser enterrado en una vasija para que el cuerpo quedara en ovillo, y en sus primeros meses dentro del vientre materno; para el mundo náhuatl no había infierno ni cielo, y en otras culturas se cree que el humo ayuda al espíritu a transitar. Luto, película que llegó a salas comerciales, es una ficción con tintes documentales en la que un joven (Rodrigo Azuela), tras la muerte de su novia y de su bebé no nacido, no sabe cómo lidiar con eso, por lo que inicia un viaje por México intentando encontrar respuestas en diferentes rituales. Esta es la ópera prima de Andrés Arochi, conocido director de fotografía por su labor en Longlegs: coleccionistas de almas, protagonizada por Nicolas Cage. Luto echó mano de personas reales de las distintas culturas por las que pasa, que explican al personaje lo que para ellos es la muerte. “Trabajamos mucho tiempo el concepto para hacerlo con gente real, y filmarla en Islandia, pero llegó la pandem
Un viaje para sanar el alma
¿Cómo soportar la pérdida de alguien cercano? La cultura zapoteca decía que había que ser enterrado en una vasija para que el cuerpo quedara en ovillo, y en sus primeros meses dentro del vientre materno; para el mundo náhuatl no había infierno ni cielo, y en otras culturas se cree que el humo ayuda al espíritu a transitar. Luto, película que llegó a salas comerciales, es una ficción con tintes documentales en la que un joven (Rodrigo Azuela), tras la muerte de su novia y de su bebé no nacido, no sabe cómo lidiar con eso, por lo que inicia un viaje por México intentando encontrar respuestas en diferentes rituales. Esta es la ópera prima de Andrés Arochi, conocido director de fotografía por su labor en Longlegs: coleccionistas de almas, protagonizada por Nicolas Cage. Luto echó mano de personas reales de las distintas culturas por las que pasa, que explican al personaje lo que para ellos es la muerte. “Trabajamos mucho tiempo el concepto para hacerlo con gente real, y filmarla en Islandia, pero llegó la pandem