México desatiende lucha contra los psicotrópicos

Durante la administración de Andrés Manuel López Obrador, la contribución de México al sistema global diseñado para combatir las amenazas que supone la aparición de nuevas sustancias psicotrópicas, algunas 700 veces más potentes que la heroína, ha sido prácticamente inexistente. Entre 2019 y 2023, México notificó ocho nuevas sustancias psicoactivas (NSP) al mecanismo de Naciones Unidas encargado de dar seguimiento a los desafíos emergentes relacionados con las drogas en América Latina y el Caribe. Del 2021 a 2023, notificó la aparición de una droga nueva en el mercado mexicano: la ayahuasca, bebida a base de plantas y a la que no se ha asignado un grupo de efecto específico. Entre 2013 y el 2018, la autoridad sanitaria mexicana reportó 34 nuevos casos identificados por laboratorios de toxicología. Si el referente es regional, la aportación del gobierno de AMLO a la lucha colectiva ha sido insignificante. Brasil notificó 22 nuevas sustancias tan sólo en 2023, mientras que Colombia y Argentina reportaron nueve