De acuerdo a concesionarios y choferes, solo el 50 % del parque vehicular que cubre la ruta Huixtla-Motozintla ha comenzado a brindar el servicio de pasaje, ante el temor de la situación que se vive en esa región de Chiapas.
Por más de una semana, 60 unidades en la modalidad de Urvan que cubren ese tramo estuvieron paralizadas por los bloqueos carreteros y los enfrentamientos entre grupos delincuenciales que impedían el libre tránsito.
Testimonio
En entrevista, uno de los choferes de la cooperativa San Francisco, afirmó que junto con otros de sus compañeros decidieron reanudar el servicio pese al temor que tienen, pero están motivados por la necesidad económica, ya que si no trabajan no tendrán dinero para llevar el sustento familiar.
Reconoció que hay el temor, tanto del transporte público como de los usuarios, aunque señalan que la necesidad es más fuerte, por lo que deciden jugarse la vida. Si no laboran terminarán con problemas económicos y la condición es cada vez más complicada.
Bajo su propio riesgo
Señaló que decidieron reanudar el servicio bajo el propio riesgo, la situación aún no está controlada.
Otro de los conductores indicó que el servicio no se reanudó al 100 por ciento, ya que algunos choferes tienen miedo.
Apuntó que los empresarios transportistas les están dando todo el apoyo para detener las unidades, mientras las autoridades atienden la situación.
“El temor fundado por la existencia de problemas de inseguridad está presente, porque los filtros en Belisario Domínguez y en Las Cruces aún persisten, pero tenemos que trabajar, si no lo hacemos, nuestras familias no comen”, sostuvo.