Empresarios y comerciantes establecidos en el centro comercial de Tapachula hicieron un llamado a las autoridades municipales y del Gobierno del Estado para que pongan orden en el sendero peatonal; lo anterior debido la concentración masiva de migrantes que acuden diariamente a cobrar remesas.
Acusan que su presencia está causando estragos en la actividad comercial, ya que impiden el tránsito libre y se presenta el comercio ambulante además de la suciedad que generan con lo que se ahuyenta a los clientes.
El sendero peatonal ubicado en la tercera calle Poniente, entre la avenida Central y la sexta Avenida Norte, es la vía más transitada en el corazón económico y comercial de Tapachula. En promedio, cada día transitan más de 15 mil personas, que acuden a realizar comprar a los comercios establecidos en esa zona el centro de la ciudad.
En entrevista el consejero de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) Costa de Chiapas, Alfredo Gálvez Sánchez, afirmó que es necesario poner orden ante la problemática que generan las tiendas departamentales que están habilitadas para el pago de las remesas, ya que la aglomeración de migrantes genera caos, basura y, sobre todo, ahuyenta a los compradores que acuden al centro histórico a realizar sus ventas.
Indicó que las autoridades deben aplicar el bando municipal para exigir a las tiendas departamentales a que su personal ordene a las personas que buscan cobrar remesas, y no afectar el libre tránsito en este espacio que de por sí es muy concurrido.
Señaló que los comercios sufren las repercusiones porque los migrantes bloquean las entradas de los establecimientos, provocando un daño colateral en sus ventas cada día, lo cual repercute en la economía.
“Este llamado no es un acto discriminatorio porque al final los migrantes generan economía en diversos sectores; sin embargo, se debe poner orden en este espacio público, que en las recientes semanas ha estado saturado por grupos de extranjeros que realizan filas para el cobro de remesas”, abundó.
Gálvez Sánchez expresó que es urgente que las autoridades convoquen a los responsables de las tiendas departamentales para que usen sus instalaciones para que el interior ordenen a quienes llegan a cobrar remesas y no lugares públicos, en donde transitan miles de personas.