Las comunidades indígenas son las que han poseído el mayor conocimiento para recolectar hongos silvestres e identificar los comestibles de los tóxicos, pero en las últimas generaciones este se ha ido perdiendo, sumado a la proliferación de nuevas especies bajo condiciones muy diferentes.
Adriana Gómez Bustamante, directora del Laboratorio Estatal de Salud Pública, comentó que, el exceso de lluvias y la falta de nutrientes son factores que hacen que los hongos sufran variaciones, que hacen cada vez más difícil su identificación, sin embargo, el consumo se mantiene como parte de los usos y costumbres de las localidades, sobre todo de los adultos y adultos mayores.
Prevención
Las autoridades de salud realizan un operativo de prevención y vigilancia para concientizar sobre el consumo de hongos silvestres, con el objetivo de prevenir intoxicaciones que pueden terminar de manera fatal. Afortunadamente, el impacto ha sido positivo y desde hace varios años no hay defunciones en la entidad.
“El consumo sí ha disminuido, justamente por el alto riesgo que se tiene en el consumo, porque no se puede hablar de dosis, porque se consumen en caldos, en combinaciones entre especies; los más vulnerables son los niños y adultos mayores, lo mejor es no comerlos”.
En Chiapas, la zona Altos es donde proliferan más los hongos debido a las condiciones ecosistémicas y del clima, favorecen su reproducción, sobre todo en temporada de lluvias.
Los lugares considerados zonas de riesgo en la entidad son los municipios de Chamula, Oxchuc, Chenalhó, Tenejapa, San Cristóbal de Las Casas, La Trinitaria, Las Margaritas y algunos aledaños que comparten condiciones climáticas y de suelo.
Llamado
Es importante que la población conozca la morfología de los hongos, y aunque no es asunto de unos días, es un conocimiento ancestral debido a que se requiere de elementos concretos para poder identificarlos.
La temporada de setas que se pueden consumir comienza a mediados de mayo y termina a mediados de octubre, periodo en que fortalecen las acciones de difusión en los municipios donde es común el consumo de estos hongos.