Considerado el “rey de los mangos”, el Ataulfo, que se produce y consume en todo el mundo, salió de cinco árboles “madre” ubicados en Tapachula, aunque uno murió por la edad y las plagas, mientras que otro se encuentra minado por las raíces de un “mata palo” que lo invadió.
Fue el investigador e ingeniero agrónomo, Héctor Cano Flores, quien descubrió esa variedad del mango en un predio propiedad de Ataulfo Morales, en 1958 y derivado de ello, lleva este nombre.
La propagación a través de injertos ha permitido al paso del tiempo la expansión masiva de un clon denominado IMC-M2, es decir, “todos los mangos Ataulfo han salido de los mismos árboles”.
Con denominación de origen que abarca los municipios de Tapachula, Frontera Hidalgo, Metapa de Domínguez, Tuxtla Chico, Mazatán, Huehuetán, Tuzantán, Huixtla, Villa Comaltitlán, Escuintla, Villa Comaltitlán, Acacoyagua y Acapetahua, en la región del Soconusco, el mango Ataulfo se cultiva en México, Sud y Centroamérica.
En los estados de Oaxaca, Guerrero, Nayarit, Sinaloa, Jalisco, Colima, Michoacán y Sonora se produce el fruto, pero también en Brasil, Perú, Ecuador, Chile y las naciones del Istmo Centroamericano, lo que permite que haya en todas las épocas del año, explica el presidente de la Asociación de Fruticultores del Soconusco, Enrique Cabal Arrivillaga.
“Todos los árboles que se encuentran sembrados en México y en otros países han salido de los cinco principales”, explica y plantea la necesidad de cuidar los siete que quedan en el predio ubicado precisamente en donde se asientan las oficinas de ese organismo.
En un breve recorrido por el lugar se pueden apreciar los grandes árboles de mango Ataulfo de más de 75 años de descubiertos, cada uno numerado y en plena producción.
Hibridación natural
Especialistas indican que la genealogía del mango Ataulfo es incierta, al desconocerse quiénes fueron sus progenitores, pero se cree que proviene de una mutación o de una hibridación nacional.
“Se trata de una fruta cien por ciento tapachulteca”, precisan, siendo Cano Flores el que descubrió los “maravillosos frutos e inmediatamente se percató de la calidad única de los mangos e inició los primeros estudios, la creación de injertos y su propagación que permiten que hoy esté en los anaqueles de todo el mundo”.
Denominación de origen
Fue en el año 2002 cuando se le otorgó la denominación de origen del mango Ataulfo, que se caracteriza por un dulce y refrescante sabor. Su composición promedio es de 69 % de pulpa, 19 % de cáscara y 8.5 % de hueso o semilla”, explica el presidente del Consejo Regulador, Alfredo Cerdio Sánchez.
Fue el 27 de agosto del 2003 que se publica en el Diario Oficial de la Federación la Declaración General de Protección de la Denominación de Origen Mango Ataulfo del Soconusco, Chiapas.
Ello es reconocido con fecha 30 de abril del 2004 por el Buró Internacional de la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual, con lo que queda establecido que el “Rey de los Mangos” tiene su origen en Tapachula.
De un aproximado a las 150 mil toneladas que se producen en unas 20 mil hectáreas sembradas en los municipios de la región del Soconusco, 35 mil son exportadas a Estados Unidos, diez mil a Canadá y mil a Europa.