El aumento de humedad durante la temporada de lluvias favorece la reproducción de insectos y vectores, como las cucarachas, zancudos y moscas, estas últimas son consideradas de más riesgo, porque son transmisores de enfermedades como la salmonella, tifoidea, cólera, así como de algunos parásitos.
Las moscas tienen un proceso de reproducción bastante rápido, debido a que colocan una gran cantidad de huevecillos en diversas superficies. Tienden a buscar lugares insalubres, como basura, heces fecales de perros, restos de comida echada a perder (por la humedad) para colocar sus huevecillos.
Claudia Gómez Acevedo, docente-investigadora de la Universidad de Ciencias y Artes de Chiapas (Unicach), comentó que al trasladarse por todos esos sitios son considerados insectos carroñeros y representan un foco de infección para las personas.
“Una vez que estuvieron en un lugar insalubre y se trasladan a otras superficies, esparcen bacterias y microorganismos con sus patas y lengua, además de que también dejan sus heces, lo que es un riesgo de enfermedades si se detienen en alimentos que están por consumirse”.
Es importante tomar medidas para evitar la transmisión de huevecillos o microorganismos. No comer en la vía pública, se debe desinfectar superficies, frutas, verduras; en cuanto a las carnes, en muchos casos se compran en mercados públicos, en los locales las mantienen al aire libre, por lo que es importante poner especial atención a la cocción.
Los alimentos crudos son aquellos que van a permitir que las enfermedades se transmitan fácilmente al ser humano, por eso se debe tomar precauciones.
Existen algunos métodos para ahuyentar las moscas, como colgar bolsas con agua, colocar limones cortados por la mitad con clavos de cocina, esparcir vinagre de manzana, así como dispositivos para matarlas, los tradicionales matamoscas y las raquetas eléctricas. Unos con mas efectividad que otros.