Niegan ingreso a trabajadoras sexuales

Sexoservidoras denunciaron a concesionarios de los módulos de la zona de tolerancia de Tuxtla Gutiérrez, mejor conocida como “zona galáctica”, por no permitirles regresar a trabajar, además de lamentar que durante la pandemia no recibieron ningún tipo de apoyo y que las autoridades les prohíben trabajar en las calles.

Las mujeres, que prefirieron proteger su identidad, acusaron directamente a Gilberto Gaytán Farrera, propietario de uno de los 18 módulos, con diez cuartos cada uno, que rentan a las trabajadoras sexuales.

Precedente

La problemática inició en el 2019, cuando dos trabajadoras denunciaron públicamente las anomalías que persistían en la zona de tolerancia, como la venta de condones que la Secretaría de Salud del estado envía de manera gratuita, el cobro de pruebas rápidas de VIH y sífilis, hasta las altas tarifas en la renta de las habitaciones.

Durante meses, las mujeres que trabajaban en el módulo 17 comenzaron a ser intimidadas hasta no permitirles el ingreso.

“No nos dejaron pasar y ahí se quedaron todas nuestras cosas”, señala una de las afectadas, apoyada por la organización Brigada Callejera en Apoyo a la Mujer “Eliza Martínez”.

Las afectadas iniciaron una queja ante la Comisión Estatal de los Derechos Humanos y un juicio inquilinario contra Gaitán Ferrera, que también es director del turno vespertino de la Preparatoria Oficial número 1 de Tuxtla Gutierrez.

Pandemia

Lamentaron no recibir ningún tipo de apoyo, incluso durante la contingencia provocada por el coronavirus.

Este espacio cerró sus puertas desde marzo a octubre de este año. “Nunca se nos apoyó ni con despensas. Muchas se regresaron a las calles del centro, pero ahí hay otros problemas con los municipales”, dijeron.

Las mujeres piden que les permitan regresar a trabajar y hacer caso a las quejas de las sexoservidoras. “Todas las compañeras están amenazadas, hasta las reunieron con hacerles lo mismo que nosotras si abren la boca”, concluyeron.