El obispo de San Cristóbal de Las Casas y administrador de la Arquidiócesis de Tuxtla Gutiérrez, Monseñor Rodrigo Aguilar Martínez, señaló que las autoridades no deben escatimar esfuerzos para brindar seguridad a los ciudadanos, pues son quienes deben garantizarla.
Lo anterior, lo dijo durante la conferencia dominical en la catedral San Marcos, donde lamentó la situación de violencia que se ha salido de control en el estado de Chiapas y que señala, ha alcanzado de manera plena a la ciudad capital.
Se unen al dolor
En ese sentido, dijo que la iglesia se une al dolor, a la esperanza y a la búsqueda de justicia de la familia de la joven Yuridia, quien murió mientras viajaba en un colectivo el pasado miércoles 20 de noviembre.
“Aún percibimos el vacío de poder y la poca capacidad para brindar seguridad a la población, que cada vez más experimenta miedo y zozobra ente esta escalada de la criminalidad. Como Iglesia seguimos implorando a Dios el don de la paz para nuestro pueblo; seguimos haciendo esfuerzos desde las instancias de la pastoral social para acompañar a las víctimas de las violencias, vengan de donde vengan, y reafirmamos nuestro compromiso de ser promotores de paz desde nuestras parroquias”, manifestó Aguilar Martínez.
Generadores de violencia
Asimismo, monseñor Rodrigo dijo que han sido testigos de cómo los generadores de violencia tomaron las calles y cometen sus crímenes cada vez con mayor impunidad y han dejando una gran huella de muerte, que alcanza a muchas víctimas inocentes.