Nuestro país es considerado centro de origen, domesticación y diversificación del maíz, ya que existen 59 razas nativas de las 220 a 300 razas que hay en el continente americano. Este grano cubre poco más de la mitad de la superficie agrícola sembrada en todo el territorio, con aproximadamente 7.5 millones de hectáreas.
La diversidad de maíces de México es el resultado de tres influencias: su domesticación, su cultivo y la diversidad de prácticas agrícolas respecto a los usos de más de 80 pueblos originarios. El cultivo tiene una gran diversidad de ambientes, por lo que los productores han logrado adaptar y mantener una extensa diversidad de maíces nativos.
Jesús Martínez Sánchez, investigador del programa de Maíz del Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (Inifap), comentó que conservar la diversidad de maíz nativo es importante porque es la principal base biológica de la agricultura en México.
Durante el conversatorio “Estrategias de conservación de maíces nativos en Chiapas”, organizado por la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader), enfatizó que sin la diversidad del maíz sería imposible satisfacer las necesidades de alimentos y otros productos en muchas condiciones agroecológicas.
Factores ambientales
Refirió que perder la diversidad de este grano resultaría en una reducción de nuestras posibilidades para enfrentar los cambios futuros de las condiciones ambientales y sociales, pues disminuiría nuestra capacidad de adaptarnos a ellos.
Existen diferentes estrategias de conservación que se trabajan en las diferentes regiones de Chiapas y del sureste; además, el Inifap realiza acciones de aprovechamiento en comunidades con alta diversidad del maíz nativo en San Cristóbal de Las Casas, Ocosingo y La Trinitaria para consolidar bancos de germoplasma.
También trabajan en el mejoramiento del proceso de almacenamiento del grano, haciendo entrega y capacitación en el uso de silos herméticos para evitar el uso de agroquímicos, conservando el maíz con menos problemas como humedad y plagas poscosecha.