Productores de mango Ataulfo del Soconusco expresaron su preocupación ante las amenazas de presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, de imponer nuevos aranceles a productos mexicanos. En ese caso, este cultivo sería uno de los más afectados; calculan que las pérdidas económicas podrían ser superiores a los 100 millones de pesos por cosecha.
En entrevista, el presidente del Consejo Regulador del mango Ataulfo, Alfredo Cerdio Sánchez, afirmó que el principal mercado de este producto es Estados Unidos, a donde se exporta más de 30 mil toneladas cada año, por lo que un arancel del 25 por ciento que buscan implementar afectaría gravemente la economía de los agricultores.
Expuso que para los productores de mango la afectación por la imposición de los aranceles representaría pérdidas millonarias, lo que reduciría sus ingresos de manera anual.
Señaló que el nuevo arancel sería catastrófico para la actividad productiva de la región, por lo que es necesario que el gobierno mexicano busque acuerdos con el presidente electo estadounidense.
“Este gravamen afectaría la comercialización del mango, ya que el producto al incrementar su precio dejaría de ser demandado en el mercado internacional, lo cual sería altamente perjudicial porque el país no tiene la capacidad de absorber toda la fruta que hay y que se produce en la región”, abundó.
Efectos colaterales
Indicó que cualquier impuesto perjudica gravemente en la región. Al afectar a los productores, la mano de obra que se contrata también sufrirá un daño colateral, así como a los transportistas y empresas que comercializan agroquímicos, en fin, a toda la cadena que participa en la producción de esta fruta.
“Si llega a establecerse con esos niveles los aranceles, entraríamos en una situación muy crítica en el sector agropecuario, productores no soportarían un arancel del 25 por ciento como prevé el gobierno de los Estados Unidos, por lo que los sufrirán una crisis económica muy severa”, indicó el entrevistado.
Mencionó que con la implementación del impuesto disminuirá la exportación de mango hacia el mercado norteamericano, ya que, si se encarece el producto, la fruta que se produce en el Soconusco dejaría de ser competitiva en el mercado internacional, a pesar de ser de calidad.