El Grupo Espeleológico Jaguar en Chiapas, con más de 15 años trabajando el sistema cárstico del estado, ha logrado documentar más de 200 cuevas en diferentes municipios, haciendo evidencia fílmica, estudios topográficos y colecta de especies, y en conjunto con la Universidad Nacional Autónoma de México (Unam) han trabajado la taxonomía para tener más datos de estos sitios.

Jaime Eduardo Gómez Rodríguez, miembro del grupo, comentó que una de las especies con las que han trabajado es el cangrejo cavernícola, “ha sido un hallazgo muy importante y especial”; una exploración de importancia fue en la cueva Cuauhtémoc, en San Fernando.

Esa cueva es de gran importancia, porque el municipio se abastecía de agua de ese sitio y quería saber la cantidad y calidad del líquido, por lo que solicitó hacer la exploración junto con el equipo de buceo de la Unam y el Círculo Espeleológico del Mayab del Caribe.

Descubrimientos

Pudieron encontrar evidencias del impacto ambiental, muchos residuos de la actividad agrícola, con agroquímicos, esto por el arrastre de las lluvias que se filtran a los sistemas subterráneos que circulan por los diversos territorios. Según el punto, el agua se va distribuyendo desde la parte alta hasta la baja, en los ríos.

Mencionó que, en Tuxtla Gutiérrez, en la colonia Los Laguitos existe una cueva horizontal de gran importancia biológica, porque es de calor y sirve como zona de maternidad para los murciélagos, una especie muy importante para la diversidad ecológica porque son dispersores, polinizadores y controladores.

“Tenemos que quitar esa idea de que todos los murciélagos buscan sangre, existen diferentes especies, con diferentes aportaciones para la biodiversidad y la ecología, por eso esa cueva es muy importante y su conservación debe ser prioridad, que no sea explotada”, recalcó.