Desde ayer lunes por la mañana, los integrantes del Sindicato de Directivos del Colegio de Bachilleres de Chiapas (Sidicobach) tomaron las oficinas centrales ubicadas en la capital chiapaneca ante la postura radical del titular Jorge Luis Escandón Hernández, quien se niega a reconocer a este sindicato, respondiendo con descuentos y hostigamiento laboral a los agremiados.
Los manifestantes dieron a conocer que desde la creación de este sindicato la Dirección General no ha querido reconocerlo, además de que las amenazas no se hicieron esperar y las puertas de la dirección se han cerrado para ellos.
Acciones
En conferencia de prensa del vocero del Sindicato de Directores del Colegio de Bachilleres de Chiapas, Luis Gabriel Mendoza Zenteno, mencionó que “estas acciones son para exigir respeto a la libertad sindical y pagos que han sido retenidos” como medida de presión para que renuncien.
Recordó que este panorama es inadmisible, puesto que el Sidicobach tiene su registro oficial ante las autoridades laborales.
“Nuestra decisión es tomar las instalaciones centrales del Cobach como acuerdo de la asamblea, puesto que los actos de hostigamiento continúan, los descuentos de salarios los están aplicando, no han tomado en cuenta nuestras peticiones; por el contrario, existe una campaña de oídos sordos en la Dirección General”, señaló.
Lamentaron que les han cerrado las puertas, incluso para las gestiones que se requieren en beneficio de los planteles, como es el material de limpieza.
“Hemos tenido que pagar de nuestra bolsa, los planteles están padeciendo esta lamentable situación, no debería ser así, pero acá permaneceremos hasta que la petición de cambio del director sea cumplida”, comentó.
“Desde el mes de diciembre comenzaron las hostilidades contra los directores; han abierto 190 procesos administrativos, han retenido salarios, han descontado. El director general no ha tenido ni la decencia de dar la cara, y mediante los coordinadores de zona ha aumentado los actos de represión”, comentó.
Bajo este contexto, señalaron que existe alteración de las nóminas en el Colegio de Bachilleres, además de que existen auditorías pendientes por resolver.
“No es más que abuso por parte del director, no pedimos otra cosa, únicamente el respeto a los derechos laborales de los trabajadores”, remarcó Mendoza Zenteno.