Con casi 35 años dedicándose a la Lucha Libre y 20 en el nivel profesional, el exótico gladiador Diamantina vivió el viernes 16 de julio uno de los momentos más complicados en este deporte al haber quedado desvanecido y convulsionándose sobre la lona en plena función.
Seis días después de los hechos ocurridos en el Centro Deportivo Roma, el profesional del “pancracio” chiapaneco se dice feliz y afortunado de poder compartir, a través de las páginas de “Cuarto Poder”, una experiencia que no le desea a ninguno de sus colegas, por más rivalidad que exista al momento de luchar.
“Hubo un daño leve a la quinta vértebra, pero afortunadamente se pudo solucionar gracias a la atención del médico especialista. Me siento más estable; obviamente, estoy en recuperación, cuidándome del golpe que fue en la base del cráneo, pero voy bastante bien. He tenido otro tipo de lesiones, pero de gravedad como esta sí es la primera vez”, expresó.
Después de recobrar la conciencia y saber que su vida estuvo en serio peligro, Diamantina comentó que para su familia también fueron minutos de mucha angustia. “En la casa, mi esposa recordó lo que pasó durante la lucha en donde perdió la vida el Hijo del Perro Aguayo. Nosotros estuvimos ahí porque a mí me tocó luchar en esa función, y para mi pareja, ver el estado en que me encontraba fue sumamente de temor”, reconoció.
La experiencia que ha acumulado luego de varios años presentándose en diversos escenarios del país y más allá de nuestras fronteras le permite entender que para estas situaciones no hay culpables, hablando específicamente de Toro Rojo, rival al que enfrentó en esta ocasión y quien lo azotó sobre la lona.
“La función fue muy accidentada, para nuestra mala suerte. Desde la primera hasta la estelar hubo lesionados, así que son cuestiones que nos pasan. Sabemos cómo subimos al ring pero no sabemos cómo vamos a bajar, por lo que antes nos encomendamos a Dios”, dijo.
A cuidarse
Por ahora, Diamantina tendrá que pasar poco más de un mes sin hacer ejercicios exigentes, pues deberá guardar reposo. “Los resultados médicos no fueron tan desfavorables. No hay daños en las cervicales, el doctor Mario Guirao me dio 15 días para tener absoluto reposo, sin ejercicio de ningún tipo y con medicamentos”, declaró.
“Después, creo que llevaremos otros 15 días más para retomar entrenamientos y ver que no exista ningún impedimento para luchar”, indicó el gladiador, y agregó que por su lesión tuvo que modificar su agenda de presentaciones por la República Mexicana.
Además, aprovechó para mandar un mensaje a aquellas personas que todavía siguen creyendo que la Lucha Libre es puro “show”. “Yo que no soy un improvisado en esto, estoy sufriendo los riesgos de mi profesión, entonces le digo a la gente que no cree que no es fácil ser luchador, pues conlleva una gran preparación y arriesgar la vida en cada función”, finalizó.