La salud de Daniel Bisogno en los últimos meses se ha convertido en tema de preocupación sobre todo después de que se diera a conocer que una nueva crisis frenó su regreso a la televisión.

Fue el pasado 4 de septiembre cuando el conductor de Ventaneando fue sometido a un trasplante de hígado, después de meses de enfrentar varias complicaciones que lo llevaron hasta el hospital en más de una ocasión.

En ese entonces, Daniel reveló que presentaba serios problemas hepáticos, pero su diagnóstico seguía siendo un misterio. Sin embargo, en una reciente entrevista, Alex Bisogno, hermano del famoso, explicó a detalle cuál es la enfermedad que lo ha mantenido alejado de la televisión.

Alex estuvo como invitado en el podcast del influencer Toni Tiburcio, exintegrante de Acapulco Shore, y fue ahí donde habló del difícil año por el que tanto él como su familia han tenido que atravesar, pues además de los problemas de Daniel, también enfrentó la muerte de su madre.

Año complicado

“Un año complicado. Las cosas más complicadas que una familia puede vivir, eso nos ha sucedido”, dijo. “Ha sido el año más difícil de mi vida, el más difícil para una familia. En cuestión de siete meses yo perdí a mi mamá, Daniel estaba hospitalizado y todas las complicaciones que tuvimos que vivir no se las deseo a nadie”.

Ya entrando en el tema de su polémico hermano, el presentador de Al extremo hizo un recuento de todas las entradas y salidas que hicieron al hospital y reveló que la enfermedad que lo mantuvo al borde de la muerte fue una cirrosis no alcohólica. “Daniel estuvo hospitalizado en diferentes ocasiones a lo largo de dos años, aproximadamente. Fue diagnosticado con cirrosis no alcohólica, una enfermedad que le puede pasar a cualquier persona”, señaló.

Aunque no sabe a ciencia cierta cómo fue que desarrolló dicho padecimiento, Bisogno explicó que puede deberse a varios factores que terminan por debilitar el hígado, ya sea dietas mal cuidadas o la automedicación.

Panorama

El panorama de Daniel era demasiado complicado, pues su hígado estaba en tan malas condiciones que prácticamente era inservible, y aunque los médicos intentaron salvarlo a base de medicamentos, este simplemente no respondió, lo que lo llevó a la única opción del trasplante.

Asimismo, explicó que en cada uno de los ingresos, el conductor se debatía entre la vida y la muerte y no fue hasta que su madre murió que presentó una inexplicable mejoría.