Erik Rubín tiene 53 años, pero en realidad para él cualquier número que lo defina es un pretexto. Es una de las figuras del espectáculo que se mantiene mejor sana física y mentalmente, para lo cual, asegura, ha aprendido algo que muchos olvidan con el pasar de los años: priorizarse a sí mismo.

El cantante suele mantener su vida privada lejos del escrutinio público, pero desde su divorcio con la conductora Andrea Legarreta, en febrero de 2023, ha recibido todo tipo de comentarios en redes sociales, lo que le ha puesto a prueba mentalmente.

“Hay gente muy cariñosa, sin duda tengo la fortuna de contar con su cariño, pero también hay gente que está enojada y que está buscando pretextos para ofender, descalificar. La clave es no tomárselo personal”, asegura en entrevista.

Finalmente, el actor refiere que si tuviera que dar un consejo a quienes han vivido algún tipo de difamación sería “tomar distancia y priorizar lo que uno es”.