El reciente compromiso de Alejandra Capetillo tomó por sorpresa a muchos, incluyendo a sus famosos padres, los actores Biby Gaytán y Eduardo Capetillo.

Sin embargo, la pareja afirmó sentirse feliz por el paso que su hija está apunto de dar, aunque, como buenos papás, no pueden evitar sentir un poco de nostalgia. A través de sus redes sociales y después de dos años de relación, Alejandra anunció que le dio sí al libanés Nader Shoueiry, a quien sus futuros suegros calificaron como un gran ser humano.

“Sí, él es un buen hombre. Espero en Dios que la armen juntos, que sean más los momentos buenos y que el amor triunfe ante las adversidades”, fue el deseo de Biby para su hija y su yerno. “Si nosotros seguimos trabajando en nuestra relación (tienen 30 años de casados), imaginen ellos dos que comienzan, pero ya tomaron una decisión”.

Desde hace un par de años, Alejandra, la tercera de cinco hermanos; se mudó a España y fue ahí donde, por amigos en común, conoció a Nader, de 36 años. La también cantante destacó que lo único que dese en el matrimonio de su hija es que el amor y las ganas que ambos tienen de luchar por su felicidad nunca acaben, pues esa es la clave de una relación exitosa. “Son una pareja preciosa, son una pareja llena de luz y se los he dicho a los dos, y esa luz es lo que le pido a Dios nunca la pierdan y que tengan esa convicción de sacar adelante un matrimonio por el que están entusiasmados y con tantísimo amor”, señaló Biby emocionada.

De igual forma, Eduardo expresó que la felicidad de Alejandra es su felicidad, y aunque sabe que hacer una vida en pareja es una decisión muy difícil, está convencido en que su hija podrá lograrlo. “Que tomen la decisión de comprometerse, es algo sumamente importante para sus vidas; yo he estado mucho en contacto mi niña, diario nos llamamos y entonces le digo ‘disfrútalo, mi amor, no lo sufras, no te preocupes, todo lo que necesites aquí estoy’”, externó el menor de los Capetillo.

Pero el orgulloso papá quiso aclarar que no se entromete en la relación de su hija, simplemente responde a los llamados de apoyo y ayuda que la joven le hace; por eso la respalda en esta y todas sus decisiones. “Lo más importante y que los seres humanos no entendemos, o que no cuesta mucho trabajo entender, es que todo está en manos de Dios, si yo hago planes y quiero que salgan como yo quiera no van a salir así, porque van a resultar como él quiera”, dijo Eduardo.