¿Qué debe hacer México frente al próximo gobierno de Trump?

Es clave mejorar la comunicación entre legisladores de ambos países e involucrar a organizaciones civiles.

Donald Trump regresa a la presidencia con más fuerza que nunca, respaldado por un gabinete de ideología radical y antinmigrante. Llega con mayor experiencia en el gobierno y sin nada que perder, pues dada su avanzada edad, es probable que este sea el último cargo que ocupe. Sus principales promesas radican en revertir lo que él y su equipo han ha denominado una “invasión migrante” y frenar a grupos criminales mexicanos a quienes responsabiliza de la crisis de fentanilo en su país.

Conociendo el perfil del personaje y considerando las amenazas sobre lo que podría hacer desde el primer día de su mandato, México debe anticiparse y prepararse para diversos escenarios. Esto requiere contar con un equipo integral y especializado en migración, seguridad y economía, ya que las amenazas de Trump suelen presentarse en conjunto, intercambiando temas comerciales por cuestiones migratorias o de seguridad.

Aunque la relación entre ambos países es asimétrica debido al poder económico y político de Estados Unidos, existe un alto grado de interdependencia que le brinda a México la posibilidad de negociar, poniendo sobre la mesa los aspectos en los que más nos necesitan, a cambio de un trato más justo y digno.

Con una frontera de más de tres mil kilómetros, México se consolidó en 2023 como el principal socio comercial de Estados Unidos, alcanzando un comercio bilateral de bienes de 807 mil millones de dólares, superando incluso a China.

Asimismo, la comunidad mexicana en Estados Unidos juega un papel fundamental en la recaudación fiscal. Según la Secretaría de Relaciones Exteriores, los mexicanos aportan 324 mil millones de dólares al erario estadounidense. Además, cada mexicano contribuye, en promedio, con $1.38 en impuestos por cada dólar que el gobierno gasta en servicios sociales, en comparación con los $0.69 que los estadounidenses aportan.

Al mismo tiempo, México no debe dejar todo el peso de la relación bilateral en el diálogo federal. Es necesario implementar estrategias multisectoriales que impulsen el intercambio educativo y académico, fortalezcan las alianzas entre cámaras empresariales y gobiernos estatales, especialmente en la frontera norte, donde se comparten intereses.

Además, es clave mejorar la comunicación entre legisladores de ambos países e involucrar a actores estratégicos como las organizaciones de la sociedad civil y los medios de comunicación. Estas alianzas deben resaltar lo positivo de la relación bilateral, sus fortalezas y los intereses comunes, promoviendo el trabajo conjunto.

Donald Trump logró conectar con los temores de los estadounidenses mediante una campaña de comunicación eficaz que moldeó la percepción de gran parte de la población, convencida de la existencia de una “invasión migrante”. Lamentablemente, el mensaje racista y xenófobo del presidente electo y su gabinete ha generado una imagen negativa de la población migrante, lo que podría incitar episodios de violencia en su contra.

Este discurso, que ha calado profundamente en la sociedad estadounidense, debe ser contrarrestado con una estrategia de comunicación sólida y dinámica, de 360 grados, a través de múltiples medios y plataformas. Es esencial difundir mensajes claros que resalten el valor de la comunidad migrante, la cultura binacional y su contribución al desarrollo y crecimiento de nuestro vecino del norte.

Será necesario enfrentar las medidas directas del mandatario estadounidense, fortaleciendo los recursos y capacidad de protección en los 50 consulados de México en EU. Esto implicará compartir información sobre sus derechos y brindar asesoría legal a nuestros compatriotas, a través de alianzas con bufetes de abogados, redes jurídicas y organizaciones defensoras de derechos civiles en ese país.

Estados Unidos y México comparten una historia dinámica de vínculos económicos, sociales y culturales en una relación en la que se entretejen multiplicidad de dimensiones que hoy más que nunca se deben visibilizar y fortalecer.