Los Temas Tabúes

Bazbaz el “Genio”

Los que se apuntan o se han apuntado como (pre) candidatos, todos, parecen apurados en levantar polvaredas en donde nadie las quiere o en inventarse agravios para justificar pleitos arcaicos o marcadamente partidistas, esto es rebosantes de intenciones electorales en un escenario en el cual, cada día, suben y bajan los bonos de los mismos según sea el tamaño del disparate o la eficacia de la manipulación. Incluso quienes alegaban, hace uno o dos meses, ser incondicionales de una u otra causa, ahora manifiestan dudas y sospechas en un escalofriante viaje hacia las verdaderas entrañas del sistema putrefacto.

Dentro de las rebatiñas habituales es cuestionable que los aspirantes a los gobiernos estatales, con la vista puesta en 2025, -también deberán ser votados los jueces, ministros y magistrados de la Corte, así como debieran serlo los funcionarios electorales para tener el escrutinio que los pusiera a salvo de los rencores y presiones presidenciales-opten por desmarcarse, salvo ejemplos muy contados, de ciertos temas tabúes, incluyendo el de los matrimonios entre personas del mismo sexo y cuanto toca a la demanda de muchas mujeres –no todas, ni la mitad siquiera-, sobre su derecho a abortar por cuento, alegan, los cuerpos lacerados son los de ellas; cuestionable afirmación pero válida en cuanto a la postura vanguardista que entraña.

Ya López -el predecesor al que le canta “Las Mañanitas” Claudia- se metió en un lío al deslindarse, solemne e hipócritamente del chavismo y el madurismo de Venezuela cuando comenzaron a aparecer pintas en apoyo de su candidatura hace casi tres años en Caracas y otras ciudades “bolivarianas”. Es obvio que la trampa fue bien planeada por sus malquerientes, cada vez más en una perspectiva delirante en la que el ex presidente perdió bonos a cada paso y sus aduladores e incondicionales tuvieron menos argumentos para su defensa. Sin dejar de apuntar que, en cierta medida, los tiroteos parlantes contra su administración tienen justificación y peso específicos en cada entidad de la República herida por la demagogia, la manipulación y la soberbia del poder... ahora en fase superlativa con la ‘súperniña’ de Palacio.

Pero tampoco se atreven a mencionar los dislates del señor Trump, el anaranjado de la Casa Blanca dispuesto de nuevo a ocuparla entrando ya en ella, y de su anciano sucesor y antecesor, Joe Biden, y hasta los defienden por sus amagos electorales, deslindándose de las injurias, afrentas y desprecios del primero sobre México y la terrible ignorancia y belicismo del segundo. Biden no fue un presidente de USA generoso con nuestro país; sobre todo porque las torpes actitudes de AMLO, incluyendo que no le contestara a un telefonema de cortesía, nos pusieron, desde entonces, en línea de fuego.

Al final de cuentas, todo es hablar de lo mismo: la pobreza insuperable, el retraso del campo, las reformas fallidas, las ideologías truncas, la mudanza de algunos personajes saltimbanquis –como, digamos, Javier Lozano Alarcón quien voló hacia la luna de Meade para perder escandalosamente y luego volver al nido-, y los permanentes agarrones entre falsos valentones que cuando apenas sienten cierto rigor salen corriendo sobre la jaca de Miguel Ángel Yunes, quien a punto estuvo de consumar el capricho de dejar en el Palacio de Gobierno de Veracruz a su hijo mayor del mismo nombre; solo eso le falto al traidor por antonomasia. Y todavía mantuvo a otro en la alcaldía del puerto. Puras vergüenzas en vez de la justicia esperada para que este sujeto siquiera los mismos y hasta mayores pasos que su predecesor, Javier Duarte de Ochoa. ¿Por qué le tienen miedo AMLO y Claudia?

Tampoco nos hablan de las complejas redes de los narcotraficantes ni, mucho menos, de las infiltraciones de los mismos en el andamiaje oficial considerando que, en el 80 por cierto del territorio nacional cuando menos, es necesario el aval de los capos para poder transitar por la política. Por eso, claro, cegaron la vida del doctor Rodolfo Torre Cantú y convirtieron en eunuco a su hermano Egidio, ex gobernador de Tamaulipas, sin que nadie persiga al segundo por su evidente participación en el crimen contra su cófrade en una tierra dominada por los intensos combates entre cárteles y funcionarios ligados a éstos.

Y con este silencio abominable se consumió el sexenio anterior y comenzó el de la señora Sheinbaum, reverenciadno al segundo Maximato de México... con los momios fraudulentos y enloquecidos de las casas encuestadoras que sirven al mejor postor.

La Anécdota

Dentro de la secuela de renuncias y acomodamientos del peñismo –sorprendente sólo por su resistencia y capacidad de esquivar los mayores señalamientos sobre corrupción-, se coló la mudanza del marcado Alberto Bazbaz Sacal, el mismo que llevó el caso de Paulette Gebara Farah, la pequeña buscada con ahínco por todo el país y hallada al pie de su cama sin que nadie explicara jamás el fenómeno-, cuyo movimiento de traslación se dio entre la Unidad de Inteligencia Financiera y el conocido CISEN –Centro de Investigación y Seguridad Nacional-, dos instituciones centradas en la investigación, precisamente, una condición fallida del personaje al considerar sus antecedentes.

El motivo de su permanencia e impunidad, pese a sus traspiés de alto raiting, no pudo ser otra que su entrañable complicidad con el ex titular del Ejecutivo federal y acaso, detrás de bambalinas, con el predecesor de Sheinbaum quien lo ampara y cobija más allá de sus desviaciones que debieron dar lugar a severas pesquisas y, en su caso, a su detención por su negligencia de dimensiones superiores.

Los zopilotes adiestrados merodean por mi ventana. Les advierto que por aquí no hay carroña. Vayan a Los Pinos y al Palacio Nacional. Estamos en el Segundo Maximato.

loretdemola.rafael@yahoo.com