El último lunes

Qué pasará este lunes por la mente de Andrés Manuel López Obrador en su último día como presidente de México. Parece estar estirando su poder hasta el último minuto.

Él sabe que, políticamente, consiguió lo que seguramente se había propuesto durante 18 años de aguerrida lucha para alcanzar la silla presidencial.

También sabe, porque no es tonto (tonto es el que piensa que es tonto), que muchas de las promesas que había hecho no se lograron materializar. Cuando llegó al cargo se encontró con una cruda realidad que, a veces también suele ser muy canija y caprichosa; de ahí que cargara la mano a las fuerzas castrenses, cuando antes dijo todo lo contrario.

En seguridad, por ejemplo, su sexenio casi llegará a los 200 mil homicidios, sin contar, las decenas de miles de desaparecidos que no se cuentan como decesos, pero quizá lo son.

En este rubro, AMLO sostuvo contra viento y marea su estrategia de no confrontar a los grupos criminales mediante el uso de las fuerzas armadas, llámese Ejército, Marina y Guardia Nacional.

La idea de “abrazos, no balazos”, ligada a “ir a las causas de la delincuencia” no dieron los resultados que él hubiera querido y que todos hubiésemos querido. Nadie en su sano juicio hubiese querido que le fuera mal a López Obrador, sobre todo en este rubro que afecta sobremanera a muchos otros.

Pese a ello y otros hierros como el fracasado Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi), el cual, en la recta final de su sexenio se recargó en el IMSS-Bienestar, el oriundo de Macuspana, Tabasco, se va con una inmensa popularidad.

Si bien es cierto que 22 millones de mexicanos, de un 62 por ciento que fueron a las urnas, no votaron por Claudia Sheinbaum Pardo, quien representa la continuidad del “obradorismo”, casi 36 millones de votantes le dieron el sí.

Volvemos al principio, qué pasará por la mente del hombre al que esos 36 millones de mexicanos y quizá más, adoran, idolatran, le dan hasta visos de santidad y le perdonan todo.

Qué imaginará AMLO en su último día al frente de la silla presidencial, porque, seguirá pesando en Morena y quizá hasta en el gobierno, pero ya no será él quien comande a las fuerzas armadas o tome las decisiones que cambiarán para bien o para mal (esperemos que para bien) el futuro de México en el corto y mediano plazo…

Primer minuto

En el primer minuto del primero de octubre Claudia Sheinbaum Pardo hará historia pues se convertirá en la primera mujer presidenta de México, pero es innegable que llega de la mano del fundador y dueño de Morena, Andrés Manuel López Obrador.

Muchos, dentro y fuera del poder en turno siguen preguntándose si ella se dejará manipular o influenciar por quien la encumbró y guió hasta el contundente triunfo del 2 de junio.

Ambos, sobre todo recientemente parecen haber mandado señales de que no será así, de que forman parte del mismo proyecto transformador, sin embargo, tienen visiones distintas y maneras de gobernar diferentes.

Él, y la propia Claudia Sheinbaum lo ha expresado en más de una entrevista, es un político nato y ella, alguien que caminó primero por el sendero de la academia. Él nació en Tepetitán, una localidad del municipio de Macuspana, Tabasco, mientras que ella vio la luz y se desarrolló en la Ciudad de México.

Apenas el fin de semana López Obrador soltó que Sheinbaum Pardo terminará de poner orden en México. Dijo que delante de ella, él es fresa. ¿A qué se referirá?

¿Quiere decir el mandatario saliente que la próxima presidenta mexicana será más dura o más radical en sus posturas? ¿El episodio vivido en los últimos días con el gobierno español fue una muestra de que ella será inflexible en ciertos asuntos?

Analistas consideran que Claudia Sheinbaum es más radical en sus posiciones ideológicas de izquierda, pero puede ser más flexible en asuntos económicos y en el trato con la iniciativa privada, por dar un ejemplo.

En fin, cuando este texto de este tecleador comience a circular, estaremos a unas horas de comenzar a conocer el verdadero rostro de la primera mandataria mexicana…

Aderezos

-Todo está listo para la toma de protesta de Ángel Torres como presidente municipal de Tuxtla Gutiérrez. Fiel a su estilo de funcionario que no le gusta perder el tiempo, el acto está previsto para la medianoche del 30 de septiembre en el patio central del palacio municipal. Quien fuera titular del DIF y de Obras Públicas en el sexenio de Rutilio Escandón Cadenas tiene un gran reto por delante: dar continuidad a lo conseguido por Carlos Morales…

-Quienes han estado de principio a fin con Eduardo Ramírez Aguilar, sin titubear y sin jugar a las chuecas ocuparán cargos importantes, aunque él fue claro tras ganar la contienda electoral: no será una agencia de colocaciones. En la nueva legislatura local dos cercanos a El Jaguar estarán en la primera línea: Luis Ignacio Avendaño en la Mesa Directiva y Mario Guillén en la Junta de Coordinación Política…

cirocastillo@hotmail.com