Raciel López Salazar
El mero chingón
El cura Marcelo
Lobo hambriento
Raciel López: Para que la cuña apriete…
1. Él no usa sotana. Sus homilías tampoco son sobre los mandatos divinos, el arrepentimiento y o la venida de El Armagedón, sino una franca apología al delito que ha agravado la crisis social histórica en los pueblos indígenas de Chiapas. Maneja con habilidad un discurso de odio.
En nuestros días la información inunda las venas mediáticas a millones de bits por segundo. Si resulta falsa, esa información se vuelve una telaraña peligrosa.
Yo recuerdo muy bien a una exdiputada del PRD que se sacó de la manga aquella inverosímil historia llamada la camioneta blanca con el fin de extorsionar al entonces gobernador Sabines. Juan José, claro, no lo permitió.
Marcelo
2. Detrás de esa piel de oveja se oculta un lobo hambriento, destructivo, feroz. Sólo le importa su vanidad, es decir, el amor a sí mismo. Beocio, ignora lo que le pasó a Narciso.
Hace 20 años, el sacerdote Marcelo Pérez Pérez llegó a Simojovel, un municipio que se ubica entre bosques tropicales y famoso por su riquísima producción de ámbar. El ámbar es una piedra preciosa que asombra incluso a los paleontólogos.
Marcelo fue enviado por El Vaticano a la parroquia de San Antonio de Padua y, decían los feligreses, era un hombre tranquilo hasta que endureció su lenguaje desde el púlpito. Ahí empezó la escisión comunitaria…y la violencia.
Simón Pedro
3.- Diez de la mañana. Simon Pedro es un joven catequista de la parroquia que administra Marcelo Pérez. 05 de julio de 2021. Simón lleva de la mano a su pequeño hijo. Caminan por el mercado de Simojovel.
Un sicario se acerca en una motocicleta y le dispara a quemarropa varios balazos. Simón Pedro queda tendido en la banqueta, sin vida. Marcelo sigue bajo sospecha.
En Simojovel, Marcelo fue acusado de pasar charola a los alcaldes, proteger cantinas, el narcomenudeo y los burdeles. La autoridad local no tomaba una decisión sin consultarle. Aquí viene a mi memoria un pasaje de la película La ley de Herodes.
Juan Vargas, el nuevo alcalde priista de San Pedro de los Saguaros, Michoacán, va al prostíbulo de doña Lupe con la intención de clausurarlo porque matan a un parroquiano durante la víspera.
Doña Lupe le dice: “Ah, qué mi licenciado, igualito que los demás”. Saca un fajo de billetes de entre sus senos y se lo tira en la mesa al licenciado, a quien antes le ha servido una copa de tequila.
Vestidas en camisón blanco provocativo, transparente, rompiendo entresijos, las chicas del lupanar lanzan miradas morbosas sobre la escena. Están a pocos metros.
Juan Vargas, todavía honestón, rechaza el soborno de doña Lupe. Entonces ésta le grita: “Mire pinche, licenciadito. Yo creo que aquí le paramos; y si tiene algo qué discutir, vaya dígaselo al señor cura, que aquí es el mero chingón”.
“El Machete”
4. Tras el crimen de Simón Pedro, el Vaticano ordena contundente, sin discusión remover al sacerdote Marcelo y trasladarlo a la iglesia local de Pantelhó, un municipio indígena en dónde sólo hay 60 escuelas, pero la mayoría de la población porta armas de fuego.
Pantelhó es una zona neurálgica porque la disputan dos grupos armados: “El Machete” y “Los Herrera”. Curiosamente, “El Machete” surge a pocos días de que Marcelo fuera designado cura del municipio. El Vaticano sabe todo.
Aliado del Centro Fray Bartolomé de las Casas, secta que provoca pesadillas incluso si uno sigue despierto, Marcelo es presuntamente el autor intelectual de “El Machete”. Un rifle, un machete o una hoja de cualquier árbol de otoño no se mueven sin su consentimiento.
El pueblo se queda a oscuras, se escuchan disparos en todos lados, hay armas por donde quiera porque a Pantelhó lo controla el cura Marcelo. ¿Cómo, de dónde sacan armas de fuego “El Machete”? Hay al menos 30 personas cuya desaparición el cura habría ordenado.
Complicidades
Marcelo supo victimizarse y abrir una red de complicidad aparte del Frayba. Y tiene nexos con más de 50 organizaciones subversivas entre las que sobresalen la Oficina Ecuménica para la Paz y la Justicia e.V. (Múnich, Alemania), otras en España, Colombia, Suecia y Venezuela.
Con trastornos paranoides pues culpa a otros de conductas propias, Marcelo sigue generando conflictos sangrientos en los Altos. El Papa Francisco instruyó trasladarlo a la iglesia de Guadalupe, de San Cristóbal.
Marcelo, lejos de aquietarse, intensificó su activismo gangsteril adentrándose a Pantelhó para incitar una rebelión. Abundaremos…
Raciel López
A usted, lector, le estoy preparando una crónica del abogado chiapaneco Raciel López Salazar, actualmente fiscal de Quintana Roo. ¿Por qué Raciel es un hombre único, sui géneris? Porque la evolución no se trata de una figura impostada, sino de experiencias acumuladas y espíritu combativo.
Escribió Octavio Paz: “Ser chingón es una voz mágica en este laberinto de emociones y sentimientos”. Raciel lo es…
Dice el aforismo: Para que la cuña apriete…