El crimen de Diego
Doble asesinato
Alcohol y muerte
Ángela Aguilar
¿Quién es la comandanta Gilda N?
1. Diego Ignacio Paz, un joven hijo único con futuro, sueños y esperanzas fue brutalmente asesinado a golpes y balas por la policía municipal de Santa Lucía del Camino, Oaxaca, con motivo de las extorsiones que cada fin de semana realizan en los operativos de alcoholímetro.
Si bien las autoridades detuvieron a dos involucrados, existen firmes sospechas de que hubo más oficiales implicados, incluyendo a la comandante Gilda N., quien, según testigos, habría ordenado el ataque.
El 7 de septiembre, familiares y amigos organizaron una marcha para exigir justicia. Con profundo dolor y en silencio, caminaron desde el Arco Norte de Santa Lucía hasta el lugar donde Diego y su amigo Josué R. fueron salvajemente agredidos la madrugada del 31 de agosto.
Diego tenía 22 años, estudiaba comunicación en la Universidad Anáhuac de Oaxaca y, al momento de la barbarie policial, manejaba su automóvil Audi.
Ni Diego ni Josué habían ingerido alcohol, confirmó la fiscalía desmintiendo el rumor de la policía municipal en el sentido de que Diego, por su estado alcoholizado, trató de atropellar a un agente.
Cuarto Poder accedió a una conversación del gobernador Salomón Jara, quien admite que la policía de Santa Lucía es una de las peores evaluadas del país por abusos. Calificó de “desproporcionado e irracional” el actuar de esa policía tras el caso de Diego.
La paradoja
2. Diego no va a volver, es cierto. Sin embargo, la policía municipal de este país está inmersa en una gran paradoja que exige un replanteamiento, a fondo, para ponerla al servicio del ciudadano, no en su principal verdugo.
Pero, ¿en dónde radica esa paradoja? O sirve a la delincuencia organizada o se “distingue” por hechos tan abominables como el de Diego. Nada de abrazos a los bandidos…
La seguridad debe ser una filosofía en cuya prioridad figuren las familias combatiendo la crisis de violencia e impunidad que asfixia a los cuerpos policiales. En la nueva narrativa gubernamental se observan, al menos, más luces que sombras.
No queremos ninguna otra tragedia como la de Diego…
Doble crimen
Escuchando a Rigo Tovar, tres personas consumían bebidas embriagantes sobre la avenida Quetzales entre calzada Señor del Pozo esquina con la calle Tucanes, colonia Los Pájaros, de Tuxtla Gutiérrez.
Los expertos definen que el alcohol es un devorador de espíritus, un demonio maligno y necrófago asociado a una criatura sobrenatural que puede adoptar numerosas formas.
El alcohol es un demonio que provoca una felicidad falsa y saca lo peor del ser humano. Hunde a un individuo en las peores resacas.
Aquella convivencia en Los Pájaros de pronto se convirtió en una violenta discusión verbal. El invitado se retiró molesto. A los pocos minutos regresó con una poderosa arma de fuego y disparó sin piedad en contra de los anfitriones, matando a padre e hijo.
Moraleja: En México, el consumo de alcohol es un problema de salud pública “porque el borracho y el glotón caerán en la pobreza, y la somnolencia los vestirá de harapos”.
Repudio
Ángela Aguilar ha sido nominada para ser Mujer del Año 2024 de la revista Glamour. Muchos consideramos que no es un ejemplo positivo para la mujer en México. No debemos premiar a las personalidades simplemente por su fama, sino por las contribuciones significativas que hacen a nuestra sociedad.
Ángela Aguilar, aunque popular, no cumple con estos criterios. Esta petición no está destinada a denigrar a Ángela Aguilar, sino a insistir en que los medios utilicen su plataforma para destacar a las mujeres realmente admirables en nuestra comunidad.
“Nos encontramos aquí para expresar, de manera contundente, nuestra profunda preocupación ante la tendencia de otorgar reconocimientos tan prestigiosos como el de ‘La Mujer del Año’ a personas cuya fama eclipsa, desafortunadamente, sus contribuciones reales a la comunidad”.
Consideramos que al otorgar estos títulos basados únicamente en la popularidad, sin importar qué tan grande o pequeña sea la fuente que lo otorga, desvirtúa el verdadero significado de este reconocimiento.
¿Mujer del año?
La figura de “La Mujer del Año” debería representar un faro de inspiración, una guía para las futuras generaciones, alguien que haya dejado una huella imborrable en nuestra sociedad a través de sus acciones y su compromiso con el bien común.
Con esta petición, los usuarios alzamos nuestra voz para exigir que los criterios de selección para estos premios sean más rigurosos y que se privilegie el impacto positivo en la comunidad sobre la mera fama.
Agradecemos la oportunidad de expresar nuestra opinión y esperamos que nuestras palabras sean escuchadas”. (Petición iniciada por Beegie Cosmos en Change.Org. Hasta ayer llevaba casi un millón de firmas, incluyendo la mía).