Este 29 de noviembre fue un día especialmente significativo en México, no solo como una fecha de conmemoración, sino también como un llamado a la reflexión y la acción en torno a un tema de salud que afecta a millones de hombres en el país: el cáncer de próstata.
Este día, declarado como el Día Nacional de la Lucha contra el Cáncer de Próstata, tiene como objetivo principal sensibilizar a la población masculina sobre la importancia de la prevención y la detección temprana de esta enfermedad, que es la principal causa de muerte por cáncer en hombres mexicanos, según datos proporcionados por el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (Issste).
La importancia de la detección temprana
El cáncer de próstata es un tipo de tumor que crece lentamente y, en sus primeras etapas, no presenta síntomas evidentes. Esta característica hace que muchos hombres no se den cuenta de la enfermedad hasta que alcanza estadios avanzados, lo que limita las opciones de tratamiento y disminuye las probabilidades de curación.
En entrevista con El Universal, el doctor Héctor Sánchez López, especialista en Urología Oncológica, explicó que el cáncer de próstata en sus fases iniciales no provoca síntomas notables.
Esta falta de síntomas evidentes refuerza la necesidad de realizarse chequeos periódicos a partir de los 40 o 45 años, especialmente para aquellos hombres con antecedentes familiares de cáncer de próstata, ya que en estos casos el riesgo aumenta considerablemente.
Factores de riesgo
Asimismo, explicó que la genética desempeña un papel fundamental en el desarrollo del cáncer de próstata, ya que tener antecedentes familiares cercanos puede incrementar significativamente el riesgo de padecer esta enfermedad.
De acuerdo con estudios médicos, si dos o más familiares directos han sido diagnosticados con esta enfermedad, la probabilidad de que el hombre desarrolle cáncer de próstata se incrementa hasta seis o siete veces.
En estos casos, las recomendaciones y las guías médicas mexicanas sugieren que los hombres con este factor de riesgo comiencen las pruebas de detección a partir de los 40 años, en lugar de esperar hasta los 45.
El impacto del estilo de vida en la prevención
Aunado a ello, dijo que la genética y el estilo de vida también juegan un papel crucial en la prevención del cáncer de próstata, pues señaló que una dieta equilibrada, ejercicio regular y hábitos saludables pueden no solo retrasar la aparición de la enfermedad, sino también disminuir su agresividad.
“Sabemos que las dietas ricas en verduras, soya y bajas en proteínas animales están asociadas con una menor incidencia de cáncer de próstata. Además, el ejercicio reduce el riesgo de padecerlo hasta tres veces”, explicó.
¿Es el cáncer de próstata común en hombres menores de 50 años?
Aunque el cáncer de próstata es mucho más común en hombres mayores de 50 años, el doctor Sánchez aclaró que no es una enfermedad exclusiva de la vejez. Aunque la incidencia es menor, los hombres menores de 50 años también pueden desarrollar esta enfermedad, especialmente si tienen factores de riesgo como antecedentes familiares o un estilo de vida poco saludable.
Sin embargo, en hombres menores de 50 años, la incidencia de cáncer de próstata es considerablemente menor. A pesar de esto, los varones que tienen factores de riesgo deben someterse a pruebas de detección regulares, incluso en una edad temprana.