Piden agilizar destitución de curas acusados de abuso

En un paso adelante en contra del flagelo de los abusos sexuales, de conciencia y de poder, que mancharon como nunca la credibilidad de la Iglesia, la Pontificia Comisión para la Tutela de Menores (PCTM), creada hace 10 años por el papa Francisco, presentó su primer informe anual sobre las iniciativas que se han puesto en marcha en torno de este tema, algo sin precedente.

En un documento de casi 100 páginas, por primera vez pintó un cuadro de la situación en todo el mundo, destacando carencias y fortalezas y, al margen de reconocer que “aún queda mucho por hacer” para que se instaure en la Iglesia una cultura de prevención en todos los niveles, planteó varias necesidades puntuales.

Pidió agilizar la destitución de sacerdotes acusados de abusos, más rendición de cuentas y transparencia, que las víctimas tengan acceso a la información sobre los casos que los afectan y una reparación no solo económica y hasta propuso la figura de un “defensor del pueblo” u “ombudsman” para que los defiendan.

El informe, que había sido pedido por el papa Francisco para que hubiera una revisión de la implementación de las políticas puestas en marcha, o no, en todo el mundo, planteó “la necesidad de una determinación clara de la jurisdicción de los distintos dicasterios de la Curia Romana, buscando asegurar una gestión eficaz, oportuna y rigurosa de los casos de abuso sexual, remitidos a la Santa Sede”